Durante el viernes 11 y sábado 12 de noviembre la agrupación de danzas de Piponas organizó un nuevo festival, dos días de canto y danza regional que los vecinos pudieron disfrutar a pleno.
A pesar de que la pandemia nos jugó una mala pasada a la gran mayoría, imposibilitando la organización de este tipo de eventos, afortunadamente Danzas Nativas Sur volvió a brillar durante este 2022, organizando sus festivales, uno ya el pasado julio y ahora en noviembre el segundo.
En comunicación con Darío Aranguren, en primer lugar nos contó “La verdad que nos fue bárbaro, todo de forma muy positiva, vinieron todas las delegaciones que tenían que venir. Fue un festival muy lindo que duró dos días, comenzando a las 21 horas y finalizando alrededor de las dos y media de la madrugada”.
En relación a la organización propiamente dicha nos comentó que si bien en cada evento van generando sus propios recursos, siendo independientes en ese sentido, un festival de tal magnitud no se organiza en dos semanas sino que significa el trabajo de mucha gente, y vinculado a esto Darío expresó “Tenemos muchos colaboradores, también una subcomisión que trabaja a la par nuestro, además recibimos el apoyo de innumerables comercios y emprendedores del Distrito”. Mencionando luego que no prefieren nada gratis y que por cuestiones de coordinación y trabajo cómodos prefieren valerse de su esfuerzo.
Destacando que “Con esto cumplimos un objetivo de la agrupación, que es hacer esto que venimos haciendo, que es ensayar, bailar donde nos invitan y hacer nuestros dos festivales, uno en unión festejando el día de la independencia y el otro que hace muchos años venimos haciendo que es en noviembre”. Luego agregó “Volver después de dos años es todo un logro y un objetivo que nos habíamos planteado. Y la verdad que tanto trabajo nos dio el rédito”.
Al finalizar detalló “Estamos muy contentos y agradecidos a todos los artistas y agrupaciones que vinieron a participar. También al Centro Tradicionalista El Rodeo que nos cedió gentilmente su predio para poder realizar el festival, ya que nuestro lugar, nuestra casa, el Club Juventud de Pipinas, está en arreglos y no se podía utilizar, así que agradecidos con el Centro que ha sido muy noble con nosotros. Y siempre muy agradecidos con el pueblo de Pipinas que no apoya”.
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